Donald Trump es elegido presidente de Estados Unidos

Donald Trump es elegido presidente de Estados Unidos

Donald Trump prometió este miércoles ser presidente “para todos los estadounidenses”. En un discurso ante sus seguidores en su fiesta de victoria en la ciudad de Nueva York, el ganador de las elecciones de Estados Unidos pidió al país que se una y prometió “representar a cada ciudadano de nuestra tierra”.

El empresario añadió que es “hora de que Estados Unidos cierre las heridas de la división” y “hora de que nos reunamos como uno”. También declaró que su gobierno será una épica de “crecimiento y renovación nacional”.

“Estados Unidos ya no se conformará con menos de lo mejor”, afirmó, añadiendo que el país “soñará a lo grande y con valor y audacia”.

El ganador de las elecciones de Estados Unidos, dijo que su rival Hillary Clinton le había llamado para felicitarlo por su victoria.

El empresario dijo que había felicitado “a ella y a su familia por una campaña muy, muy peleada”, en declaraciones ante sus seguidores en su fiesta de victoria en la ciudad de Nueva York. “Le debemos una gran deuda de gratitud” por su servicio, añadió.

Esa cortesía era un tono muy distinto de la habitual retórica acalorada de Trump sobre Clinton. El empresario ha sugerido que su rival debería ir a prisión y los coros de “íEnciérrenla!” han sido un elemento fijo de sus actos de campaña.

Trump fue elegido el martes como presidente de Estados Unidos, después de que un electorado ansioso por dar la vuelta a la clase política del país escogiera al empresario para liderar al país.

Trump, un inesperado candidato republicano, ganó impulsado por votantes que buscaban cambios y estaban dispuestos a aceptar a un aspirante poco fiel a los hechos y acusado de conducta sexual inapropiada. En una victoria que conmocionó los mercados bursátiles en todo el mundo, se impuso a la demócrata Hillary Clinton, que habría sido la primera mujer en servir en la Oficina Oval.

GANA TERRITORIOS QUE ERAN AZULES

Trump arrasó en territorios considerados feudos demócratas desde hace años, ganando Pennsylvania y Wisconsin, estados que no elegían a un candidato presidencial republicano desde la décadas de 1980. Necesitaba ganar casi todos los estados en disputa, como ocurrió, imponiéndose en Florida, Ohio, North Carolina y otros.

Los mercados internacionales y el mercado de futuros de Estados Unidos se desplomaron reflejando las preocupaciones de los inversionistas de lo que podría significar la presidencia del magnate para la economía y el comercio mundial.

Empresario de bienes raíces neoyorquino que vive en un lujoso ático en Manhattan, Trump forjó una sorprendente conexión con estadounidenses blancos de clase obrera que sienten haberse quedado atrás en un país con una economía cambiante y cada vez más diversificado. Presentó la migración, tanto la procedente de Latinoamérica como de Oriente Medio, como la raíz de muchos de los problemas que afectan al país y canalizó el temor al terrorismo dentro y fuera del país.

Trump asumirá la presidencia del país con un Congreso de mayoría republicana. Los aspirantes republicanos al Senado derrotaron a sus rivales demócratas en estados clave para retener su dominio en la cámara. La formación mantiene además la presidencia de la Cámara de Representantes.

En su camino a la Casa Blanca, Trump se saltó años de convencionalismos políticos, dedicando duros insultos personales a sus rivales, calificando a los migrantes mexicanos de violadores y asesinos y prometiendo suspender temporalmente la entrada de musulmanes a Estados Unidos. No hizo públicos sus registros fiscales — rompiendo otra tradición de campaña — dejó a un lado el robusto trabajo de campo que ayudó a Obama a ganar dos elecciones presidenciales, confiando en su lugar en multitudinarios mítines para alentar a sus partidarios.

Su campaña se vio salpicada frecuentemente por el caos, y tuvo tres directores este año. La última, Kellyanne Conway, elogió los logros de su equipo al conocer el resultado final, con un mensaje en Twitter que decía “los mítines multitudinarios importan” y “hemos ampliado el mapa”.

El ánimo en el cuartel general de Clinton se ensombrecía a medida que avanzaba la noche y mientras algunos de sus seguidores se marcharon, otros lloraban y se abrazaban. Sus principales asesores de campaña dejaron de devolver llamados y mensajes mientras Clinton y su familia seguían el desarrollo de la noche electoral en un lujoso hotel.

A las 02:00 de la madrugada, el director de la campaña demócrata, John Podesta, dijo a sus seguidores que se marchasen a casa. “Seguimos contando votos y cada voto debería contar”, afirmó.

Trump heredará una nación temerosa y profundamente dividida por las oportunidades económicas y educativas, la raza y la cultura. Las encuestas de salida subrayaron las profundas divisiones que han definido la campaña de 2016.

Las mujeres de todo el país se expresaron en favor de Clinton por un margen en doble dígito, mientras que los hombres se mostraron significativamente más a favor de Trump. Más de la mitad de los votantes blancos respaldaron al republicano, mientras que nueve de cada 10 afroamericanos y dos tercios de los hispanos votaron por la demócrata.

Servicios Internacionales

Leave a Comment